viernes, 7 de octubre de 2022

Ratón de biblioteca: Al fin amanece / José Brindisi y otros




 

Contar es el modo más humano de ponerse en la piel de un semejante. Nos obliga a experimentar en nuestra mente lo que han sentido otros. Es falso el lugar común que asegura que el mayor valor de la literatura es que no sirve para nada. Sin la ficción nunca podríamos comprender a nadie, ni siquiera a nosotros mismos. Los relatos nos han hecho humanos porque nos enseñaron a vivir vidas ajenas, a in- tuirlas, a vibrar en consonancia con los demás. Habitamos una atmósfera cargada con infinitas historias que llamamos “cultura”. Es el aire que respiramos. El alimento que nos constituye. Narrar nos dice quiénes somos, cómo somos, cuáles son los valores que dan fundamento a nuestra existencia. Cada vez que alguien ayuda a otro a sostener la vida, a comprender, la especie se justifica. 

Hemos pasado un año conversando con personas que padecían algún consumo problemático. En sus propios hogares, en bares, en instituciones, en hospitales. Cada escenario nos albergó durante muchas horas durante las cuales ellos se desnudaron con generosidad ante nuestras preguntas. Los hemos visto humedecer los ojos mientras ha- blaban o internarse en silencios largos y profundos que nosotros no nos animamos a romper. Nos hemos dado abrazos largos y temblorosos apretones de manos. Estas personas nos han confiado lo más valioso que tienen, sus propias historias de vida. Fuimos a su encuentro sin prejuicios y volvimos más sabios. Nos enseñaron muchas cosas: la tremenda dificultad de luchar contra sus propias compulsiones, el dolor del estigma de la mirada ajena, el de la incomprensión o la culpa, el coraje de enfrentar lo que les ocurre y la esperanza renovada cuando encontraron la mano solidaria de un equipo de profesionales que supo recibirlos con conocimiento y humanidad. Aprendimos también de equipos como el del Servicio de Toxicología del Hospital Fernández liderado por el Dr. Carlos Damin que hay un modo responsable y científico de ayudarlos preservando el aspecto humano que funda todo encuentro en el ámbito de la salud. Cada uno de los pacientes que se atendía con ese grupo de profesionales nos destacó su enorme agradecimiento por el modo en que fueron asistidos, a veces después de un largo peregrinaje de muchos años sin encontrar respuesta.

 

No hay comentarios: