Pacientes de película / Carlos Hernández Lahoz

El que fuera jefe del servicio de Neurología del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), jubilado ahora hace siete años, Carlos Hernández Lahoz (logroñés de 74 años), ofreció ayer una conferencia en el Espacio Circus titulada 'Pacientes de película', un estudio reflexivo de algunas de las enfermedades neurológicas más reconocibles a través del cine clásico y moderno.

Así, ante un público que no apartó ojo de la pantalla y que, al mismo tiempo, escuchó con atención los comentarios del especialista, el doctor fue viajando a través de la historia del cine para poner el foco sobre los personajes caracterizados con algún trastorno neuronal. La enfermedad de Alzheimer, la paraplejia, el Párkinson y el autismo, y cómo la industria cinematográfica las presenta a través de los distintos caracteres, fueron las protagonistas.

Todo comenzó con la banda sonora inaugural de '2001: Odisea en el espacio', de Stanley Kubrick. Depués se proyectaron distintos fragmentos precisamente escogidos. «La enfermedad a veces trae conductas desagradables, pero todos estos pacientes de película comparten tanto la amabilidad como una perspectiva común: la del que padece la enfermedad y no la del que la estudia». Por eso, y porque, como dijo Hernández-Lahoz, el cine es «el arte de contar historias», las imágenes hablaron «por sí solas».

En 'The good wife', una serie protagonizada por Michael J. Fox, aparece caracterizado un actor con discinesias (uno de los síntomas que produce la enfermedad de Párkinson), «un abogado que aprovecha su condición para convencer a un jurado popular».

 En el otro extremo, pero con el mismo nivel de raciocinio sobre la propia enfermedad, Fiona, protagonista de 'Lejos de ella', una mujer con Alzheimer que decide ingresar por su propio pie en una residencia geriátrica al ser consciente de su problema.

«Todos estos caracteres son anti-héroes que sufren una dolencia que les termina derrotando, pero que, mientras tanto, la afrontan con paciencia y la terminan modulando con sus propias vivencias», expuso el médico. 

De este modo, salieron a relucir los ejemplos de 'The men', con un Marlon Brando que acepta la paraplejia, o de 'Sunrise at Campobello', donde el presidente Roosevelt acepta la poliomielitis. (Ver)