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Desde hace más de un año –¿quizá dos?– por la radio pasan un anuncio en el que se oye a un torero que, con el tonillo de brindar el toro, dice: "Señorah..., ¡va por uhtedeh!". Acto seguido, se oye un frenazo de coche y una voz de mujer que se sorprende: "Però, xato..., ja has acabat la feina?". En la versión española la mujer tiene acento andaluz y dice: "Pero, chiquiyo..., ¿ya has acabao la faena?". Es curioso que mezclen dos referencias, la taurina y la automovilística. Queda clara la broma entre los dos tipos de corridas, la taurina y la seminal. Aunque, que se sepa, en las corridas de toros hay toreros, capotes, monteras, banderillas, espadas, apoderados, coletas, caballos y picadores, pero no automóviles, al menos dentro de la plaza. A pesar de la incongruencia de mezclar esos dos caminos metafóricos, el anuncio se entiende a la perfección: al llegar el momento de la verdad, un señor se corre demasiado rápido y su partenaire sexual protesta. Acto seguido, un locutor explica dónde puede uno solucionar los problemas de eyaculación precoz y de impotencia: en el Boston Medical Group. El eslogan es "Si tu vida sexual está bien, lo demás no importa". Quimn Monzó
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si el alargamiento del "tempo" o...
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