Fotografía Carlos Ayesta
TENER FE
¿Es más difícil tener fe que graduarse en medicina?
no lo sabemos (lo intuimos)
pero en ambas situaciones
debes entregar ciegamente tu único y perplejo corazón
Los borrachos quiebran botellas
Los drogadictos dejan jeringas
Las serpientes se extravían y vienen
Los choferes se distraen
El vidrio en la playa
La aguja en el parque
La serpiente en el patio
El carro destrozado
Si algo te pasa y abres los ojos en un hospital
sin ninguna posibilidad de salvación
puede que aparezca un médico extraño y generoso
vestido de Pessoa
y te sane y quedes como un recién nacido
Pero debes creer
nada detiene a los pies descalzos
que avanzan en la oscuridad
las botellas rotas en la playa malquerida
no intimidan a los cuerpos que duermen en la arena
y si alguien pintara ese panorama
lo titularía “el cuadro de la fe”
Ascenderé a lo negro plantado en la blancura
no calmo mis dolores, no me salvo a mí mismo
y debo acudir a los poderes más honestos -
Un poder honesto es un milagro-
para que hagan latonería y pintura con mi cuerpo y mi alma
Lo bueno de José Gregorio de los Hernández nuestros
es que sin haber intercambiado rezos en su nombre
llega de repente y te salva
sin pedirte nada
que no sea la fe
lo mismo que Pessoa con su poesía.
José Pulido (amigo)
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