Los padres se plantean pedir responsabilidades en los tribunales
P. G. del Burgo, Valencia
Angustiados y desesperados. Así es como se sienten los padres de las dos adolescentes que esta semana cumplirán un mes de repetidos reingresos en la UCI del hospital Clínico de Valencia tras sufrir una reacción adversa momentos después de administrarles la segunda dosis de la vacuna contra el virus del papiloma humano.
Ante la falta de perspectivas y la inexistencia de un diagnóstico certero que explique las reiteradas crisis convulsivas que sufren las menores cada vez que las trasladan a la habitación, que obliga de subirlas de nuevo a la UCI (Raquel, la menor de Burjassot ha reingresado ya en cuatro ocasiones y Carla, la menor de origen ecuatoriano, tres), las familias han lanzado un SOS a la comunidad científica internacional para que "aporten cualquier información que pueda influir en su tratamiento".
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