"Iñaki, hijo puta", "Iñaki apesta". "Me voy a hacer una paja, ahora vengo". Eran entradas cortas, ni siquiera las más virulentas, y podían leerse el jueves epntre los comentarios que seguía al vídeo de Iñaki Gabilondo en elpais.com. ¿Puede permitir este diario que uno de los periodistas más resetados de este país sea tratado de este modo en sus páginas? Creo que no. "Me meo en vuestras igualdades, ahora mismo me voy a que me dé un masaje una amiga que está como un tren y a la que después pondré a cuatro patas, mientras vosotras seguís amargadas hablando de tonterías. Y si hoy con suerte matan a alguna lagarta que se quería quedar con el piso del exmarido, me abriré una cervecita para celebrarlo". Este comentario, sobre el que me advirtió Gema Solanas, se publicó en el blog colectivo de Mujeres y es solo una muestra del tono que tratan de imponer los muchos trolls (provocadores) que frecuentan ese espacio.
Milagros Pérez Oliva: Los "trolls" se apoderan del debate.
Yo he "pactado" con ellos...
1 comentario:
Hola Fernando:
Ciertamente es una pena que se filtren de ese modo este tipo de comentarios que vierten los “trolls”. ¿Sería, tal vez, necesaria una moderación más atenta y menos permisiva en determinadas ocasiones?
¡Gracias por compartir la noticia y hacernos reflexionar sobre el uso y, en ocasiones, “abuso” de las redes sociales y espacios web!
Un saludo.
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